El impago del salario por parte del empresario es una vulneración grave a los derechos del trabajador. Si te encuentras en esta situación, es crucial actuar con diligencia y conocimiento para defender tus intereses.
Cada proceso es diferente y deberías consultar con un abogado para que analice tu caso. A continuación te dejamos un ejemplo de los pasos habituales a seguir en estos casos.
El primer paso consiste en comunicar a la empresa el impago del salario de manera fehaciente. Puedes hacerlo verbalmente, pero se recomienda hacerlo por escrito mediante un burofax. Este documento servirá como prueba de la notificación y la fecha en que se realizó.
En el burofax, debes indicar:
“Estimados Sres./Sras. de [Nombre de la empresa]:
Por la presente, les comunico que no he recibido el salario correspondiente al mes de [mes] de [año]. La cantidad adeudada asciende a [cantidad] euros.
Les requiero para que abonen la cantidad adeudada en un plazo de [días] días hábiles desde la recepción de este burofax.
En caso de no recibir el pago en el plazo indicado, me veré obligado a iniciar las acciones legales oportunas para reclamar mis derechos.
Atentamente,
[Tu nombre]”
Si la empresa no responde al requerimiento o no paga el salario en el plazo establecido, puedes presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo. Este organismo público tiene la función de velar por el cumplimiento de la normativa laboral y puede iniciar un expediente sancionador contra la empresa.
Puedes presentar la denuncia de manera online en la sede electrónica de la Inspección de Trabajo: https://www.mites.gob.es/itss/web/index.html. También puedes hacerlo de forma presencial en las oficinas de la Inspección de Trabajo de tu provincia.
Si la Inspección de Trabajo no logra que la empresa pague el salario, o si prefieres una resolución más rápida, puedes iniciar un procedimiento judicial para reclamarlo.
En caso de extrema necesidad, puedes solicitar al juez que adopte medidas cautelares para asegurar el cobro del salario. Estas medidas pueden incluir el embargo de bienes de la empresa o la retención de sus cuentas bancarias. Puedes solicitar las medidas cautelares al mismo tiempo que presentas la demanda judicial.
Tienes un plazo de un año para reclamar el salario impagado desde la fecha en que debería haberse pagado.
Tienes un plazo de 4 años para denunciar el impago del salario ante la Inspección de Trabajo.
Tienes un plazo de 15 días hábiles para presentar la papeleta de conciliación si decides iniciar un procedimiento judicial.
Si la empresa es condenada a pagar el salario impagado, también podrá ser condenada a pagar una indemnización por daños y perjuicios. Esta indemnización puede cubrir los gastos que hayas tenido que afrontar como consecuencia del impago, como intereses de demora, gastos de abogados, etc.
La indemnización por daños y perjuicios se calcula en función del perjuicio económico que haya sufrido el trabajador como consecuencia del impago del salario.